En estos días se ha celebrado en Sevilla el congreso de la muerte, (amparados por nuestro dinero por la mala administración de la Junta de Andalucía, unida a su incosciencia, junto con la deshumanizada ley de la ex-ministra Aido).
Los componentes del mismo, comen y viven de niños inocentes que nunca tendrán la oportunidad de ver la luz, de crecer, conocer, de experimentar, de gozar, de sufrir, de soñar, en una palabra ¡Vivir!
No nos dejemos convencer por quienes, enfundados en poder y fuerza, a base de repetir conceptos y consignas, enmascarando lo que son sus intereses personales y partidistas, insertan sus ideas en las mentes, llevándonos a pensar y ver lo que ellos quieren y en cada momento les convienen. Dividiendo y enfrentando a la sociedad.
Sí, mi cuerpo es mío,pero cuando concibo ya es la unión de dos cuerpos, de dos almas, de dos vidas. No podemos ir contra las leyes naturales. La naturaleza se impone por encima de todo criterio humano establecido. Las mujeres estamos hechas de un cuerpo, de una psicología, con unos instintos maternos, desarrollados en delicadeza y finura, arraigados en nestro ser de generación en generación, desde el principio de los siglos . No podemos atentar contra nosotras mismas, en nombre de la ley, la libertad y el progreso, alterando nuestra psique, lastimándonos e hiriéndonos de por vida. No hay situación por dificil que sea, que nos pueda llevar a negar la donación de la vida a nuestro propio hijo, (estando éste ya enraizado en la esencia de nuestra ser) siendo mutilado, asesinado, profanado en el santuario del vientre de su madre. De hecho no nos dicen como quedan de frustradas y tocadas las mujeres que al abortar nos vemos sin el fruto de nuestro vientre. Cuando ya no hay paso atrás, acentuándose más el dolor al ver al hijo perdido, en el espejo de los otros hijos. Ese siempre nos faltará. ¿No sería mejor al estar convencidas de no poder hacernos cargo de nuestro niño se lo integráramos (por la adopción) en una familia de las muchas que desean ardientemente ese hijo? ¿No nos sería más llevadero pensar en un hijo vivo que en un hijo muerto?
Mis tres niños, afortunadamente escaparon de pura casualidad a lo que estaban destinados a ser arrojados a las trituradoras o el contenedor de desechos humanos, de la muerte cruel. ¡Vamos! Que con los cuerpecitos de mis niños existió la posibilidad de que lo emplearan en la elaboración de cosméticos y con ellos,haberlos yo usado en cuidar y mejorar mi aspecto físico. ¡Mostruoso!
Quizás tengamos que esperar a que la raza humana esté en peligro de extinción para que se legisle en defender a los que ahora se matan, tal vez entonces pase a ser protegido por los derechos humanos y todos veamos con claridad, pavor y terror lo acontecido.
Nosotros, los cristianos, tenemos la ley perfecta en un "CAMINO-VERDAD" abierto y seguro que es Jesús=¡VIDA!
La maternidad en toda mujer nos dignifica, nos completa, nos hace más mujer, agrandándonos el corazón, abriéndonos caminos de ternura, bondad y comprensión que nos hace superarnos por encima de lo imposible, de lo increible, haciéndonos vivir y gozar el amor en todo su esplendor, en un amor sin fin.
María fué y es Magnifica porque fué mujer, porque concibió, fué grande por ser Madre del que legisla con Sabiduría y Justicia ¡El Unico!
Unamonos a Ellos, en nuestras vacilaciones, dudas, miedos, e impotencias y el Camino a seguir se abrirá ante nuestros ojos.
¡Sí, a la vida!
Festividad de todos los Santos
